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Olímpicos

Réplica sísmica: Cristóbal Marte dice en COD ha existido por décadas «un desorden organizado por intereses lucrativos»

Reclama renuncia en pleno de la dirigencia en el organismo regulador de los deportes nacionales.

Por Miguel Pichardo/retodeportes360.com

SANTO DOMINGO.- El director del Proyecto Nacional del Voleibol de la República Dominicana, Cristóbal Marte Hoffiz, afirmó que la grave crisis que sacude al Comité Olímpico Dominicano (COD) con la reciente renuncia de seis de sus directivos, es consecuencia del «desorden organizado con intereses lucrativos» que durante décadas ha denunciado en el organismo regulador de los deportes nacionales.

En tono enérgico Marte Hoffiz, un empresario y ex ministro de Deportes que ha dedicado gran parte de su vida e incluso sus propios recursos al desarrollo del volibol, declaró que el lamentable y triste escenario provocado por la dirigencia olímpica llevan a pensar que «sólo atienden sus asuntos propios por lo que debieran renunciar todos e irse para su casa».

En entrevista concedida al programa Inside Deportivo que conducen los periodista Américo Celado y Julio Castro por CDN canal 38, Marte Hoffiz dijo que resultará penoso y una vergüenza que los atletas dominicanos que participarán en junio próximo en los Juegos Olímpicos de París 2024, tengan finalmente que hacerlo bajo la bandera y el himno del Comité Olímpico Internacional (COI) «por estos pendejos que sólo han perseguido intereses impropios».

«No me encontraría ver a las Reinas del Caribe desfilar en la ciudad de París frente al mundo sin la bandera nacional, bajo la sombrilla y el himno del Comité Olímpico Internacional y que el país tenga que pasar por esa terrible humillación», subrayó Marte Hoffiz. «Es un desorden organizado con fines lucrativos lo que históricamente ha habido ahí, lo he venido diciendo desde 1993 y ustedes los periodistas lo saben».

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Tres de los seis dirigentes que presentaron renuncias «irrevocables» en el COD.

El también presidente de la Confederación NORCECA de Voleibol, cargo que ocupa desde el 2001, la población dominicana no tolerará que su delegación que le representará en París 2024 tenga que hacerlo bajo la bandera del COI y exhibiendo «el sagrado lienzo patrio que nos legaron Duarte, Sánchez y Mella, lo que nos identifica ante el mundo como dominicanos».

«Sería una verguenza que no se merece mi país que tanto amamos y trabajamos por él cada día con mayor entusiasmo», subrayó.

Renuncias en el COD

Agregó que las renuncias de los seis directivos en el COD sólo ha agudizado una crisis interna que desde hace tiempo se venía tejiendo en el organismo. “Pienso que no es justo que por intereses personales de un grupo de dirigentes, nuestros atletas tengan que pasar por esa terrible vergüenza de ir con otra bandera y no con la nuestra».

Garibaldy Bautista, presidente del COD.

«Esa gente no midió las consecuencias de sus acciones a la hora de dirigir esa institución de esa manera, por eso pienso que deben irse para su casa”, subrayó el también vicepresidente de la Federación Internacional de Voleibol.

Un terremoto sacudió al COD el pasado 9 de enero de este año 2024 con la masiva renuncia de seis de sus once directivos, incluyendo a Francis Soto, Irina Pérez y José Manuel Ramos, primer, segundo y tercer vicepresidentes, además del cotesorero Jorge Blas Díaz, así como los vocales Francis Soto y Juan Núñez.

Justo 9 días después aún persiste la crisis con el movimiento olímpico desmembrado y sin aparente salida a corto plazo, pese al compromiso nacional con los Juegos Olímpicos de París 2024.

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Escándalos de corrupción

Se recuerda que se trata de un organismo sacudido en los últimos meses por escándalos de corrupción interna, además de decenas de conflictos entre directivos federados por presunta malversación de fondos en asociaciones y federaciones.

El artículo 43 de los estatutos del COD manda la celebración de nuevas elecciones para sustituir a los dirigentes renunciantes, pero hasta ahora sólo se conoce la negativa de Luisín Mejía a intervenir como miembro del COI, seguido de un silencio sepulcral interno en el organismo.