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Opinión

Tatis Jr: Rostro de San Diego y del béisbol

Por Miguel Pichardo/retodeportes360.com

Fernando Jr es un jovencito (24 años recién cumplidos) por cuyo torrente sanguíneo se pasea el talento integral como un pimentoso jugador de béisbol, envidiablemente dotado de las 5 herramientas fundamentales para convertirse en breve tiempo en todo un astro del negocio, pero, además, acompañado de un angel, carisma, afabilidad y química para granjearse amigos y admiradores, seguidores o no de su club Padres de San Diego. Todos coincidimos en que se trata de un diamante en bruto que sólo necesita que él mismo comprenda su estatus como futura estrella, de un buen pulidor, algo de orientación de sus más cercanos para evitarle caer en los errores del pasado propios de su inexperiencia y, naturalmente, del respaldo de todos. El muchacho es increíble. El que sigue el béisbol de las Mayores con la pasión con que lo hemos hecho a lo largo de los años, sabe perfectamente de lo que estamos hablando.

Fernando Tatis Jr.

Los que vieron a los Padres antes y después del regreso de Tatis Jr tras el cumplimiento de su prolongada suspensión, debe reconocer la sanidad emocional en el ambiente que ese talentoso petromacorisano impregna entre sus compañeros en la cueva (club-house en inglés) y en el terreno. Y qué decir de su total entrega en la defensa y ofensiva, su cooperación y disposición, fácil conducción para su mánager Bob Melvin y el resto del cuerpo técnico, en fin, una joya de jugador.

Esta quizás larga introducción se justifica porque he querido salir al frente a las críticas de algunos contra la actitud mostrada recientemente por Tatis Jr frente a una oleada de abucheos insultantes que el muchacho ha recibido en algunos partidos de los Padres, y que él ha respondido con la gracia, buena actitud, ánimo elevado y hasta, diría yo, con inteligencia: bailando y cantando en el terreno de juego por su espíritu caribeño. No creo que eso sea un pecado ni muchos menos, como consideran algunos, una falta de respeto a los fanáticos. De ninguna manera. Lo que Tatis Jr no puede es devolverles a los fanáticos con insultos, improperios, gestos obscenos y demás. Por todo lo planteado sólo me resta pedir que dejemos ser a ese muchacho, desarrollar su talento a plenitud, disfrutar su juventud y el oficio que ama (el béisbol). No podemos aspirar que el muchacho sea como cada quien quiera, sino ser él mismo: Fernando Tatis Jr, sólo que siempre enfocado ….Y roguemos a Dios que le proporcione salud para que alcance al máximo el estrellato en las Mayores, y que todos podamos disfrutarlo.

Cole hacia su 1er. Cy Young?

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Gerrit Cole.

El astro de los Yankees es actualmente el punto más luminoso, no sólo del cuerpo monticular, sino en todo el equipo, en el penúltimo lugar de la División Este de la Liga Americana, pese a tener la nómina más alta de todo el béisbol. Cole, quien nunca ha ganado un premio Cy Young en su exitosa carrera de 10 años en las Mayores, parece encaminado y decidido en su oncena campaña a lograr ese codiciado galardón, pues registra invicto en triunfos en sus primeras seis aperturas , una en marzo y cinco en abril para totalizar 5-0, efectividad de 1.11, Whit de apenas 0.84, 40.2 entradas lanzada, 20 hits, 5 carreras limpias y 44 ponches. Dos de esas victorias en interligas frente a los Gigantes y Filis (marca de 2-0, 12.1 innings, una carrera limpia, 6 hits, 5 transferencias y 19 ponches. En tanto que adversando a los equipos de su liga registra 3-0, uno sin decisión, 28.1 entradas, 4 rayitas limpias, 6 transferencias y 25 ponches. Sin duda alguna, un verdadero caballo sobre el montículo.

Retos de Chapman, Kirk y Acuña Jr

Matt Chapman.

El antesalista Matt Chapman terminó la pasada temporada con los Azulejos registrando números, en algunos casos, por ancima de los alcanzados en su última temporada de 2021 con los Atléticos de Oakland, desde donde llego para sustituir a Josh Donaldson. Bateó .229 (de 538-123), 27 jonrones, 27 dobles, un triple, remolcó 76 carreras, un OPB de .324 y un OPS de .757, comparado con el 2021: bateo .210, 72 remolcadas y 27 jonrones.

Sin embargo, en su séptima año en la gran carpa, Chapman ha alcanzado una intensa ofensiva en el primer mes de la campaña, con claras señales de encaminarse a poner números que satisfagan al mánager John Schneider y a la fanaticada canadiense, quizás hasta superiores a lo que ha sido su mejor año (2019, bateó .249, con 36 jonrones, 36 dobles, 91 remolcadas y dos triples).

El mexicano Alejandro Kirk.

Otro que está empeñado en demostrar que su formidable actuación del 2022 (bateó -285 -de 470-134-, 19 dobles, 14 jonrones, 63 impulsadas, OBP de .372 y OPS de .787)), no fue fruto de la casualidad, una chepa para decirlo en buen dominicano, es el receptor mexicano Alejandro Kirk, con físico de jugador de softbol -pequeñito y gordito-, pero con una gran conducción de los lanzadores y talento en el manejo del madero. Esos números en 139 partidos en el 2022, en su tercer año con club canadiense, fueron superiores a sus dos primeros años en todos los órdenes. En el primer mes de la actual campaña su bate no se ha hecho esperar, con average ofensivo .270 (de 63-17), dos jonrones, 10 remolcadas, OBP de .413 y OPS de .794. Es decir, el nativo de Tijuana, México, de 24 años de edad, lleva un ritmo ofensivo para igualar el 2022 y hasta con un esfuercito más hasta superarlo.

Y mirando ahora hacia el jardinero venezolano Ronald Acuña Jr, dueño de las herramientas para definitivamente alcanzar el estrellato en las Mayores con los Bravos de Atlanta, sin embargo, las constantes lesiones han frenado, con notables reducciones en partidos jugados y en turnos consumidos en las estaciones de 2020 y 2021. La situación en 2022 para el nativo de La Guaira no fue diferente, con average por debajo de su talento (.266, 15 jonrones, 24 dobles y 50 vueltas producidas.

Ronald Acuña Jr.

Ahora, el 2023 es otro cantar para el jugador suramericano, pues en los primeros 30 partidos del primer mes de la campaña ha bateado para .368, 15 impulsadas, 5 jonrones, 11 dobles, un OBP de .455 y un OPS de 1,051. El cañonero venezolano lleva una proyección que, de mantenerse en salud (libre de pelotazos, deslizamientos peligrosos y en su trabajo defensivo, podría terminar con número respetables como aquellos alcanzados en su mejor año (2019) en las Mayores, con promedio ofensivo de .280, 101 impulsadas, 22 dobles, 41 jonrones, dos triples, OBP de .385 y OPS de .883. Podrá lograrlo? Claro que sí, el talento está ahí.